Aprender Tarot ¿Con una baraja o con más de una?

La mayoría de los lectores que conozco tienen varias barajas de Tarot. Las razones para esto son muchas. Algunos compraron una baraja que encontraron interesante en el momento de la compra, pero posteriormente no tuvo un buena vibración. Algunos aprendieron a leer con un mazo determinado y luego buscaron por su cuenta.

La adquisición de una nueva baraja es una decisión a tomar con cuidado. Por un lado, las barajas de Tarot no son baratas y a veces el resultado final será lanzando en un cajón, por no mencionar la gran inversión en tiempo y estudio que requiere su aprendizaje.

Por eso recomiendo que cuando estés comenzando en apreder tarot, busques un mazo que te guste y utilízalo durante un tiempo, al menos hasta que estés cómodo con él sin tener la necesidad detener el libro a tu lado. Si encuentras que esto es duro, no te dejse engañar pensando que con una nueva baraja será más fácil de aprender. Si bien esto es a veces el caso, sobre todo si no te gusta de tu baraja actual, con más frecuencia no lo es. Una nueva baraja no va a ser más fácil a menos que tengas ya una buena base de interpretaciones a construir.

Una vez conseguido eso, una nueva baraja puede ser emocionante y puede revitalizar tu interés por la lectura y por la tirada de cartas. No tengas la sensación de que tienes que tener la nueva baraja de la que todo el mundo habla. Una baraja de Tarot es como un amigo. No debemos descartar viejos amigos cada vez que hacmos uno nueva.

Recordar que tengo el resto de mi vida para aprender lo hizo mucho más fácil y menos estresante. No hay que aprender tres cartas al día, o incluso una carta cada día. Debes ir a tu propio ritmo. Nadie te está juzgando, no hay exámenes.
Toma tu tiempo, desarrollar una relación con tu baraja, grabar lo que aprendes y en pocos meses te sentirás muy a gusto con la lectura del Tarot.